Siendo tú mismo no engañas a nadie, pero lo más importantes es que no te engañas a ti mismo. Es fundamental estar en coherencia con lo que sentimos, pensamos y hacemos. Si no es así, se producen los desequilibrios y empieza la inestabilidad en algunas áreas de nuestra vida.
Para conseguir centrarte y buscarte a ti mism@, prueba lo siguiente:
1.Cuida tus prioridades: Hacer el bien y estar disponible para los que te rodean es genial, pero tus necesidades también son importantes. Trabaja para ti y para satisfacerte, eso se llama AUTOCUIDADO.
2. Trabaja en tu autoconcepto: Haz una introspección y conócete bien: ¿Quién eres? ¿Qué tienes que ofrecer? ¿Por qué eres valioso? ¿Qué quieres hacer en la vida?… Conocernos y saber sobre nosotros es un punto clave para poder mostrarnos tal y como somos.
3. Acepta que no le puedes caer bien a todo el mundo (ni aunque fueras la mejor persona del planeta): Las experiencias, la manera de entender la vida, los valores, las necesidades…, hay muchas cosas que nos diferencian a un@s de otr@s. Es importante comprender lo que nos distingue y ser flexibles. La tolerancia y el respeto son fundamentales para una vida plena.
4. Respétate: No permitas que nadie te falte el respeto por miedo a perder a esa persona. El que te falta el respeto no tiene cabida en tu vida. Y respétate a ti mism@, permítete cometer errores y ser igual de flexible como lo eres con los demás.
5. Bieninterpreta: Si te inquieta el trasfondo de lo que se dice, pregunta: «¿A qué te refieres con esto, tiene que ver conmigo?». Es la mejor manera de aclarar dudas. No todos los comentarios van «malintencionados». Ahora con las redes sociales, todavía es más difícil descifrar la intención de los mensajes. Así que, ante la duda, pregunta.
6. Siéntete cómodo en las interacciones. Tu atención tiene que estar puesta en lo que está sucediendo, no en la posibilidad de meter la pata con algo que digas. Si te focalizas en que las cosas van a salir mal, muy probablemente salgan mal, por el simple hecho de estar más nervioso de la cuenta o darle demasiadas vueltas. Lo que se llama en psicología «profecía autocumplida».
7. No cedas cuando no te apetece algo: Puedes rechazar un plan y seguir conversando con tus amigos. Estar siempre disponible no es un valor. Tienes que aprender a marcar tus límites y tus tiempos. Todos necesitamos nuestro espacio y no somos peores por rechazar un plan. Hay momentos para todo.
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